Lo que pone en valor a una buena Maestra de Ceremonias, no es lo que dice sino lo que NO dice . Mi principal función es ayudaros a gestionar los distintos momentos y emociones que tendrá tu boda con la menor cantidad de palabras posibles. Vosotros y vuestros invitados sois los que tenéis que usar el micrófono. Mi “expertisse” está basada en la gestión emocional. Controlo desde mi tono de voz, hasta mis movimientos para no llamar nunca la atención, y busco la naturalidad por lo que no todo lo que digo os lo podré contar con antelación. Lo que SI HARÉ, será dotarla de contenido, organizar un guión, pautar los momentos, aconsejaros en vuestro compromiso y en los textos de vuestros allegados. Fui la primera en hacer este tipo de ceremonias y desde que empecé he escrito muchos procesos ceremoniales que circulan libremente por internet, pero tengo claro que la boda no es mía, es vuestra, así que me adapto a vuestro gusto y opciones. |